El equipo de baloncesto de Toledo ha protagonizado un mes de noviembre sobresaliente, logrando cuatro victorias en igual número de partidos. Esta destacada racha de resultados sitúa al conjunto bajo la dirección de Alex Aparicio al nivel del líder invicto, CB Al-Qazeres. No obstante, el único lunar en este brillante mes fue la derrota en la final del Trofeo JCCM, que se adjudicó el Club Baloncesto Albacete.
Aparicio ha sido reconocido como el mejor técnico de la Liga RibéSalat en noviembre, un galardón que celebra su exitosa transición al primer equipo tras su experiencia previa con el filial. Este joven entrenador ha sabido imprimir su sello en el equipo, mejorando su nivel de juego y obteniendo grandes resultados con las jugadoras. En una reciente charla, Aparicio destacó la naturalidad con la que ha sido recibido en su nuevo cargo, agradeciendo el esfuerzo y la adaptación de sus jugadoras al estilo de juego que él propone.
A pesar del excelente rendimiento mostrado hasta ahora, Aparicio mantiene la cautela y asegura que el equipo todavía tiene margen de mejora. «La temporada es muy larga», señala. «Si bien hemos sentado unas bases y tenemos identidad, aún estamos en el proceso de construir lo que queremos ser». Además, reconoce que otros equipos en la liga, particularmente los de Cáceres, podrían ser los favoritos, aunque su ambición es pelear por estar arriba.
La reciente derrota en la Final del Trofeo JCCM contra Albacete fue un golpe, pero el entrenador ve el aprendizaje como un aspecto positivo de esta experiencia. Aceptar la derrota y dejar atrás la desilusión fue clave para que su equipo mantuviese el enfoque en la liga, llevando a cabo una estrategia que les ha permitido seguir cosechando triunfos.
Con respecto a los objetivos de la temporada, Aparicio afirma que, aunque ser competitivas es clave, no descartan la posibilidad de aspirar a títulos. «No hay excusas para no competir al máximo», enfatiza. Aunque reconocen que no son las favoritas, la confianza en sus capacidades para ganar a cualquiera en el escenario nacional les da la motivación necesaria para continuar trabajando y ofreciendo un buen baloncesto.
Este noviembre ha sido, sin duda, un mes de éxitos para el baloncesto toledano, pero todos en el equipo son conscientes de que la temporada aún está en sus primeras etapas. La ambición es clara: seguir mejorando y competir en la parte alta de la tabla, un compromiso que reflejan en cada uno de sus partidos y entrenamientos. Con su pasión y dedicación, el conjunto toledano se prepara para afrontar los desafíos que aún quedan por delante.
Fuente: Federación de Baloncesto de Castilla-La Mancha
