Casi una semana tras el alboroto causado por su revelación en la revista ¡Hola!, Alejandra Rubio finalmente habló el martes, 25 de junio, en el programa «Así es la vida», para aclarar todas las dudas y controvertidas opiniones que han surgido desde el anuncio de su embarazo junto a Carlo Costanzia. Su entrevista, liderada por Sandra Barneda y César Muñoz, no solo sirvió para que compartiera cómo se sintió al descubrir que estaba embarazada y la reacción de su madre ante la noticia, sino que también se convirtió en un momento para que Rubio afrontara las numerosas críticas con firmeza y determinación.
Una de las críticas más repetidas ha sido el aparente contrasentido entre censurar la explotación de su vida personal por parte de su familia en los medios y, sin embargo, ella misma hacer un anuncio tan personal como su embarazo. Rubio fue categórica al responder a sus detractores, asegurando que nunca ha vendido su vida a través de exclusivas y que su decisión de compartir la noticia de su embarazo fue simplemente para hacerlo de manera bonita y no por dinero, destacando que su aparición en los medios no es una necesidad económica sino una elección personal.
Asimismo, la joven se defendió de las acusaciones de hipocresía y de no ser coherente con sus críticas pasadas hacia su tratamiento mediático, reafirmando que su enfoque siempre ha sido mantener su vida privada alejada del escrutinio público en la medida de lo posible. Con la publicación de la noticia de su embarazo, Rubio quería combatir narrativas negativas y malintencionadas que podrían surgir, especialmente de personas dentro de la misma industria televisiva que, según ella, han creado una imagen distorsionada de quien es ella realmente.
La entrevista también sirvió para abordar otra controversia: las imágenes de Rubio fumando estando embarazada. Ella admitió tener un hábito fuerte que ha reducido significativamente con la orientación de su ginecóloga, buscando mitigar los rumores y críticas sobre su comportamiento durante el embarazo.
Otro punto de discusión fue la remuneración que Rubio habría recibido por la exclusiva de su embarazo, un tema sobre el cual desmintió las especulaciones y rumores de cantidades exorbitantes, declarando que si bien hubo un pago, este no fue el motivo detrás de su decisión de compartir la noticia.
En resumen, la aparición de Alejandra Rubio en «Así es la vida» fue un intento de poner fin a las especulaciones y críticas, al tiempo que subrayaba su deseo de vivir una vida alejada del constante escrutinio mediático, respetando su privacidad y enfocándose en su bienestar y el de su familia en desarrollo. Su firme respuesta ante las críticas subraya la complejidad de manejar una vida personal bajo el constante ojo público, especialmente para figuras jóvenes que crecieron en el foco de la fama debido a sus familias.
