En Madrid, el Ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró que no hubo negociación política con el régimen de Nicolás Maduro para facilitar la llegada a España del líder opositor venezolano Edmundo González, quien solicitó asilo político. Esta afirmación se produjo ante las especulaciones y afirmaciones contrastantes por parte del gobierno venezolano, que señala un acuerdo entre ambos países para autorizar la salida de González.
En diálogo con Carlos Alsina para el programa Más de Uno de Onda Cero, Albares enfatizó en la ausencia de condiciones políticas en el proceso para otorgar asilo a González. El ministro describió el procedimiento como puramente técnico, basado en los protocolos habituales para vuelos desde Caracas hacia Madrid, destacando la necesidad de autorización por parte de Venezuela, algo habitual en estos contextos.
El domingo, Edmundo González, de 76 años, llegó a Madrid acompañado de su esposa en un avión de las Fuerzas Armadas españolas, aterrizando en la base aérea de Torrejón de Ardoz. Albares subrayó que la intervención de España se limitó exclusivamente a aspectos operativos, negando cualquier diálogo político con Venezuela sobre este tema. Esta declaración surge en respuesta a las declaraciones del fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, y la vicepresidenta Delcy Rodríguez, quienes sostuvieron que hubo un acuerdo bilateral para la salida de González.
El ministro reiteró la posición española respecto a la situación en Venezuela, aclarando que el asilo político otorgado no altera la política exterior española hacia el país sudamericano. España continúa sin reconocer la victoria electoral de Nicolás Maduro, exigiendo transparencia en las actas de los comicios presidenciales denunciados por fraude.
Finalmente, Albares destacó la postura de España y la Unión Europea de buscar una solución pacífica y «genuinamente venezolana» a la crisis, lejos de imposiciones externas. Reafirmó el compromiso de España de apoyar a los líderes opositores venezolanos que requieran protección, manteniendo un enfoque diplomático de paciencia y prudencia.
El caso de Edmundo González reaviva el foco internacional sobre Venezuela, en un momento donde varios países y organismos internacionales cuestionan la legitimidad del gobierno de Maduro y buscan soluciones diplomáticas a la profunda crisis política, económica y social que vive el país caribeño.