BM Alarcos prosiguió su racha victoriosa en la competición, sumando su cuarto triunfo consecutivo y manteniéndose así entre los líderes de la tabla. Este logro no es casualidad, sino el fruto del esfuerzo continuo y la creencia en las capacidades del equipo, que sigue demostrando su fortaleza y crecimiento. A pesar de los desafíos que representan los viajes y las exigencias del calendario, la escuadra de Álvaro de Lara mostró su mejor versión desde el inicio del encuentro, imponiendo un juego eficaz que les permitió dominar en la cancha.
El equipo visitante se destacó por su rápida transición de campo a campo durante la primera mitad, encontrando espacios clave para vulnerar la defensa local. La capacidad goleadora estuvo bien distribuida entre varios jugadores, lo que complicó aún más la labor defensiva de los Maristas. A pesar del esfuerzo local por mantenerse competitivos, los visitantes supieron administrar su ventaja, llegando al descanso con un marcador favorable de 21-16.
En la reanudación, Alarcos mantuvo la intensidad, evitando cualquier atisbo de reacción por parte del equipo de casa. La sólida actuación de David Enric, quien fue clave en la defensa, junto a la aportación de Adonis en el ataque, aseguraron que el control del juego permaneciera en manos visitantes. Pese a los intentos de Maristas por revertir la situación, Ciudad Real demostró su superioridad, consiguiendo una victoria significativa en un entorno donde el balonmano se vive con pasión.
