En un incidente que ha generado conmoción y críticas hacia la actuación policial, un agente de policía de Oklahoma está bajo investigación luego de ser acusado de agresión sobre un hombre de 71 años, resultado en graves lesiones físicas. El agente, identificado como Joseph Gibson, de 28 años, enfrenta acusaciones severas tras un encuentro con Lich Vu, de origen vietnamita, el cual derivó en una confrontación física con consecuencias lamentables.
El altercado se originó el pasado 27 de octubre, en el contexto de una discusión acerca de una infracción de tráfico en la que no se reportaron heridos inicialmente. Sin embargo, la situación escaló rápidamente, resultando en un violento incidente captado por la cámara corporal del propio agente. Las imágenes muestran a Gibson tirando al suelo a Vu después de una verbalización agresiva para que guardara silencio. La caída provocó a Vu una hemorragia cerebral, una fractura de cuello, y fractura de la cuenca del ojo, lesiones que requirieron hospitalización.
Este tornarse de eventos ha levantado un debate en torno al uso de la fuerza por parte de los agentes de policía y la efectividad de las cámaras corporales en proveer un registro fiable de las acciones policiales. El incidente, en particular, generó una reflexión sobre la interacción entre la policía y los ciudadanos, sobre todo cuando existen barreras idiomáticas de por medio.
La fiscal del condado de Oklahoma, Vicki Zemp Behenna, calificó la actuación del oficial Gibson como un uso irrazonable de la fuerza y aseguró que la Fiscalía lleva a cabo una investigación rigurosa sobre el caso. La comunidad vietnamita local ha mostrado su apoyo a Vu, destacando las dificultades de comunicación que enfrentó durante su interacción con el agente. Thuan Nguyen, presidente de la comunidad vietnamita de la ciudad, expresó su aprobación hacia la decisión de investigar el incidente y subrayó la imposibilidad de compensar el dolor sufrido.
Vu, por su parte, ha sido dado de alta pero aún experimenta mareos y dolor de cabeza, secuelas de las graves lesiones sufridas. En tanto, Gibson ha sido puesto en baja administrativa en lo que sigue el proceso de investigación. Este caso ha abierto un capítulo más en la discusión sobre la conducta policial, las medidas de rendición de cuentas y la protección de los derechos de los ciudadanos, especialmente de aquellos que, por barreras lingüísticas o culturales, se encuentran en una posición de mayor vulnerabilidad.