En un reciente episodio de La Sexta Xplica, un programa conocido por abordar temas de interés actual con un enfoque crítico y diverso, se desató un intenso debate sobre la situación económica de los jóvenes en España. La discusión, que tuvo lugar el pasado sábado, se centró en la dificultad que enfrentan los jóvenes para ahorrar y cómo el consumismo afecta a esta generación en comparación con las anteriores.
El economista Gonzalo Bernardos fue uno de los principales interlocutores del debate, y no dudó en expresar su opinión sobre lo que considera un problema fundamental: el alto grado de consumismo entre los jóvenes. Según Bernardos, la juventud actual se caracteriza por una incapacidad para disfrutar de la vida sin incurrir en gastos significativos, una tendencia que, afirma, no se observaba en generaciones pasadas. "Lo que se pretende, principalmente, es disfrutar, pasárselo bien… La juventud no sabe divertirse sin gastar y esto antes no sucedía", señaló.
Estas declaraciones no tardaron en generar polémica, especialmente entre los jóvenes presentes en el plató, quienes se sintieron ofendidos por las generalizaciones y la crítica implícita a su estilo de vida. Afra Blanco, sindicalista y colaboradora del programa, se posicionó como una voz destacada entre las críticas hacia Bernardos, cuestionando la validez y la justicia de sus afirmaciones. Blanco defendió a la juventud española, argumentando que se trata de la generación mejor preparada de la historia, a pesar de enfrentar dificultades económicas sin precedentes, como la precariedad laboral y el alto costo de la vida. "Hoy hay más jóvenes que en la última década trabajando. Tratar a la juventud de este país como ignorante y no preparada es faltar a la verdad. Es la generación mejor preparada", afirmó Blanco, enfatizando además la falta de consideración hacia los problemas reales que afectan a los jóvenes, como los bajos salarios y la especulación en el mercado de la vivienda.
El intercambio de opiniones puso sobre la mesa el problema persistente de los salarios insuficientes para cubrir necesidades básicas, un tema que, según Blanco, debería ocupar el centro de cualquier debate sobre la economía y la sociedad españolas. "Solo el 8% de las viviendas en Madrid están por debajo de los 1.000 euros en régimen de alquiler", señaló, ilustrando la gravedad de la situación inmobiliaria en el país.
A pesar de las críticas, Bernardos intentó defender su postura, aunque reconoció la existencia de un problema salarial. Sin embargo, insistió en que el nivel de gasto de los jóvenes sigue siendo una cuestión crítica. El debate culminó sin una resolución clara, pero logró poner de relieve las tensiones y los desafíos que enfrentan los jóvenes en la España contemporánea, marcando un episodio más en el debate nacional sobre economía, generaciones y el futuro del país.