En la reciente sesión plenaria se ha debatido una propuesta cuya finalidad era la de modificar el estatus de un día festivo local, a petición de la Asociación de Supermercados de Castilla-La Mancha (Asucam). La polémica propuesta buscaba que los trabajadores del sector de supermercados pudiesen laborar en dicho día festivo, una medida que, según Asucam, podría beneficiar tanto a la economía local como a la comodidad de los consumidores.
La discusión, que generó puntos de vista encontrados entre los miembros de la corporación municipal y representantes sindicales, concluyó con la decisión de mantener la fecha como día festivo. Los defensores de la festividad resaltaron la importancia de garantizar el descanso de los trabajadores del sector y preservar las tradiciones y días de asueto locales. También se mencionó la necesidad de mantener un equilibrio laboral y el bienestar de quienes se desempeñan en un sector que ha enfrentado altos niveles de exigencia, especialmente en tiempos de crisis sanitaria.
Asucam, por otra parte, expresó su decepción ante la votación, argumentando que una apertura excepcional durante este día podría haber representado un impulso adicional para el comercio en una época de recuperación económica. La asociación sostuvo que sus estudios indicaban un potencial incremento en las ventas y una respuesta positiva por parte de la población que disfruta de mayor flexibilidad en sus compras durante los días festivos.
La decisión ha sido, por tanto, conservar la tradición y brindar a los trabajadores del sector el descanso merecido en la festividad local. El debate ha puesto de manifiesto la compleja tarea de equilibrar las demandas económicas con los derechos laborales y la calidad de vida de los empleados, un asunto que se antoja cada vez más relevante en un contexto de constante cambio y modernización de los sectores económicos.
