La consejera de Economía, Empresas y Empleo de Castilla-La Mancha, Patricia Franco, ha dado a conocer los últimos datos sobre accidentes laborales en la región, señalando una disminución del 4% en el número de estos incidentes durante los primeros ocho meses del año. A pesar de este descenso, la tasa de incidencia de accidentes en relación con la población activa también ha mostrado una caída superior al 6%. Sin embargo, estos resultados positivos se ven empañados por un incremento alarmante en las muertes laborales, que han alcanzado un total de 36, es decir, once más que en el mismo periodo del año anterior.
Franco ha subrayado que el incremento de accidentes mortales, especialmente en agosto donde se registraron ocho, es motivo de gran preocupación. De estos casos fatales, tres fueron causa de accidentes de tráfico, cuatro se debieron a infartos o situaciones similares y solo uno estuvo relacionado directamente con las condiciones en el lugar de trabajo. «El hecho de que 36 personas hayan perdido la vida en este periodo es una señal de que debemos intensificar nuestros esfuerzos en materia de seguridad laboral», ha expresado la consejera.
Durante su intervención en la jornada sobre ‘Trabajos saludables en la era digital’, en el contexto de la Semana Europea de Seguridad y Salud Laboral, Patricia Franco enfatizó la necesidad de abordar los nuevos desafíos que plantea el teletrabajo y su impacto en la salud de los trabajadores. En este sentido, advirtió que, aunque la digitalización representa una ventaja, también conlleva riesgos, especialmente en lo que respecta a enfermedades musculoesqueléticas.
La consejera definió la transformación digital como una “revolución” similar a la industrial, que requiere adaptaciones y medidas de seguridad necesarias para proteger a los trabajadores en la Comunidad Autónoma. En este sentido, Franco hizo un llamado a la colaboración y asistencia para revertir esta preocupante tendencia en la seguridad laboral.