El próximo 13 de octubre de 2025, Estados Unidos conmemorará un hito significativo: el 250 aniversario de la fundación de la Armada de los Estados Unidos, una institución que ha sido fundamental en la defensa y proyección del poder del país a lo largo de su historia. La proclamación de este aniversario, realizada por el presidente, resalta no solo la importancia histórica de la Marina, sino también el sacrificio de innumerables hombres y mujeres que han servido bajo su insignia.
Todo comenzó hace 250 años, cuando el Segundo Congreso Continental, en un momento decisivo de la Revolución Americana, tomó la audaz decisión de establecer la Marina Continental. Este paso se dio en un contexto de incertidumbre, tras el estallido de la guerra en las Batallas de Lexington y Concord y la negativa del Rey Jorge III a aceptar las súplicas de paz de las colonias. La necesidad de proteger el comercio y las costas llevó a los líderes de la época a reconocer que un ejército terrestre solo no podría lograr la independencia; era necesario un poder naval que pudiera desafiar a la armada británica.
La historia desde entonces nos ha mostrado el papel crucial que ha desempeñado la Armada en su búsqueda de libertad. Desde las batallas por la independencia hasta los conflictos en el siglo XX, cada enfrentamiento ha estado marcado por la dedicación y la valentía de los marineros. Se cita una carta del General George Washington que enfatiza la importancia de una fuerza naval decisiva, subrayando que, sin ella, el país no podría alcanzar victorias significativas.
A lo largo de los años, la Armada ha enfrentado a adversarios de diferentes tamaños y formas, abriendo caminos y resguardando la soberanía nacional. No solo ha luchado en grandes guerras, sino que ha sido un pilar en cada capítulo de la narrativa estadounidense, siempre al servicio de su país, mostrando un compromiso que se perpetúa en cada nueva generación de marineros y sus familias.
A medida que nos acercamos a esta conmemoración, la proclamación del presidente llama a todos los estadounidenses a honrar no solo la rica herencia de la Marina, sino también el sacrificio y la resolución de aquellos que han servido. El evento promete ser un momento de reflexión, homenaje y reconocimiento, un recordatorio de la historia compartida y el precio de la libertad.
La invitación está clara: en este 250 aniversario, celebremos el legado de la Armada, manteniendo vivo el espíritu de sacrificio y patriotismo que ha caracterizado su historia desde 1775.
Fuente: WhiteHouse.gov
