En un notable despliegue de crecimiento económico, el presidente Donald J. Trump ha anunciado que su administración ha asegurado más de 5 billones de dólares en inversiones dentro de los Estados Unidos durante sus primeros 100 días en el cargo. Este ambicioso plan promete generar más de 451,000 nuevos empleos, marcando el comienzo de lo que se perfila como una nueva era de prosperidad americana. Las inversiones abarcarán áreas clave como la manufactura avanzada y la infraestructura de inteligencia artificial, reafirmando el papel de Estados Unidos como líder global en innovación.
Desde que asumió la presidencia, Trump ha mantenido un enfoque decidido en revitalizar la industria norteamericana, destacando la importancia de las políticas fiscales favorables como motor del crecimiento. En días recientes, varias importantes corporaciones han dado a conocer sus planes de inversión, lo que ha agregado impulso al objetivo de Trump de reforzar el sector industrial.
IBM ha liderado este flujo de anuncios al comprometerse a invertir 150 mil millones de dólares en sus operaciones de crecimiento y fabricación en EE. UU. durante los próximos cinco años. Thermo Fisher Scientific también se unió a la ola de inversiones, anunciando un incremento de 2 mil millones de dólares en sus operaciones de manufactura en el país, lo que también fortalecerá sus esfuerzos en innovación.
La expansión de la manufactura no se detiene ahí. Corning está ampliando su planta en Michigan con una inversión de 1.5 mil millones de dólares, añadiendo 400 empleos bien remunerados. Por su parte, Merck & Co. planea destinar 1 mil millones de dólares para construir una moderna planta de fabricación biológica en Delaware, creando al menos 500 nuevos puestos de trabajo. La compañía ha vocalizado su compromiso con formidables inversiones en el país, anunciando que destinará más de 9 mil millones de dólares en los próximos cuatro años a mejorar sus capacidades de manufactura y de investigación.
La ola de nuevos proyectos incluye una mezcla de participaciones de empresas de tecnología y biotecnología. Amgen, por ejemplo, ha comprometido 900 millones de dólares para expandir sus operaciones en Ohio, citando las políticas pro-crecimiento del presidente como facilitadoras de su rápido crecimiento. Asimismo, el Grupo Bel ha decidido invertir 350 millones de dólares en la expansión de su producción en el país, generando 250 nuevos empleos en varios estados.
En la lista de inversiones también se encuentran proyectos magnánimos como el Project Stargate, liderado por Softbank y OpenAI, que anuncia un compromiso de inversión privado de 500 mil millones de dólares en infraestructura de inteligencia artificial. Apple, por su parte, ha prometido una inversión de 500 mil millones de dólares en manufactura y capacitación en EE. UU.
La magnitud de las inversiones se extiende a otros sectores, con empresas internacionales y gobiernos también mostrando su confianza en el futuro económico de Estados Unidos. Los Emiratos Árabes Unidos han prometido invertir 1.4 billones de dólares a lo largo de la próxima década, mientras que Arabia Saudita ha anunciado 600 mil millones de dólares en inversiones durante los próximos cuatro años. Japón se ha comprometido adicionalmente a destinar 1 billón de dólares en la economía estadounidense.
Con estas iniciativas, la administración Trump involucra a un amplio espectro de sectores industriales en un esfuerzo por potenciar la economía nacional, prometiendo así una revitalización que podría tener repercusiones positivas a largo plazo en el empleo y la producción estadounidense.
Fuente: WhiteHouse.gov