Este domingo 19 de mayo, marcado como un punto de inflexión en la temporada, el Manchego se enfrentará a un crucial desafío: lograr la permanencia en la Segunda RFEF o descender a Tercera. La atmósfera de tensión y expectativa se hará sentir intensamente en el Román Suárez Puerta de Avilés, un estadio preparado para acoger a más de 5.000 espectadores en un encuentro decisivo programado para las 18 horas. La lealtad y pasión de los aficionados quedará demostrada con la presencia de cerca de un centenar de mancheguistas, quienes se desplazarán en autobús y coches para apoyar a su equipo en este trascendental partido, ansiosos por ver a su equipo asegurar la permanencia después de una temporada llena de adversidades.
El partido arrancará desde un punto de igualdad, manteniendo el marcador inicial de 0-0 establecido en el primer encuentro disputado en Ciudad Real. El Manchego, pese a no haber logrado una ventaja en el primer juego, demostró ser merecedor de algo más tras un encuentro marcado por la tensión y una lucha incansable. Bajo esta premisa, el equipo se encuentra ante la posibilidad de reescribir su destino en este segundo enfrentamiento, considerado por muchos, incluido el entrenador ‘Pato’ Graff, como una batalla cargada de nerviosismo, ansiedad y la necesidad imperiosa de no cometer errores. En este escenario, el equipo deberá sobrepasar la presión y transformar la experiencia adquirida en la temporada en la clave para la victoria.
La historia y estadísticas de enfrentamientos previos en la temporada regular se vuelven secundarias frente a la carga emocional y la determinación de ambos equipos por asegurar su lugar en la Segunda RFEF. La experiencia ganada en encuentros anteriores, especialmente el logrado en Yecla, se perfila como un factor potencialmente decisivo para el conjunto mancheguista. En este ambiente cargado de expectativas, tanto los jugadores en el campo como los seguidores estarán unidos en un único propósito: superar los obstáculos y celebrar la satisfacción de haber permanecido firmes frente a los desafíos, marcando el fin de una jornada intensa con la mirada puesta en el futuro del equipo en la competición.
