
Alonso emprende la misión de unir a Manuel y Leocadia, aferrándose a la esperanza
Las emociones de La Promesa se entrecruzan en pasillos como los hilos del tapiz que imaginamos como inquebrantable pero que ya hemos visto que está lleno de costuras frágiles. La historia se enrasa gracias a un Alonso que se obstina en que una reconciliación entre Manuel y Leocadia no está perdida, aun y cuando todo indique lo contrario. El marqués