En un lamentable suceso que sacude a la ciudad de Palma, un joven de 19 años ha sido detenido tras haber atropellado a un niño de tan solo dos años con su patinete eléctrico. El incidente, ocurrido en la tarde del miércoles en la calle Nuredduna, deja al descubierto la imprudencia y el riesgo ligado al uso inadecuado de estos vehículos en zonas peatonales.
La Policía Local, que ha hecho pública la noticia, informó que los hechos acontecieron alrededor de las 20:05 horas, cuando una patrulla de vigilancia de la Unidad de Intervención Inmediata observó a dos individuos manejando un patinete eléctrico a una velocidad inusitadamente alta para una calle peatonal. Al intentar detener a los jóvenes por el peligro que representaban para los transeúntes, estos optaron por huir, desoyendo las órdenes de los agentes y alterando su trayectoria bruscamente, acción que terminaría en la tragedia del atropello.
El impacto fue de tal magnitud que el pequeño fue lanzado varios metros a través del aire, quedando herido. Los responsables del hecho perdieron entonces el control del patinete y cayeron, pero, lejos de prestar ayuda, decidieron emprender la fuga a pie, abandonando el lugar en direcciones opuestas. La policía logró detener a uno de ellos tras una corta persecución; este joven fue identificado plenamente en dependencias policiales y quedó en libertad con cargos, pendiente de comparecer ante la justicia, al no contar con antecedentes penales.
Asimismo, la investigación reveló que el patinete había sido modificado para alcanzar una velocidad de 81 km/h, un detalle que resalta la peligrosidad con la que fue manejado y que incluso provocó un accidente con un agente policial durante la verificación de la velocidad, resultando en un corte profundo en la pierna del mismo que necesitó de atención médica urgente y 23 puntos de sutura.
Este evento abre nuevamente el debate acerca del uso de patinetes eléctricos en zonas urbanas, especialmente en áreas peatonales, y la necesidad de una regulación más estricta y medidas de seguridad que protejan tanto a los usuarios de estos vehículos como a los peatones. Las autoridades locales instan a la población a seguir las normas de tránsito y a usar los patinetes eléctricos con responsabilidad, para evitar que episodios tan lamentables como este se repitan en el futuro.
