Descubrir Asturias es sumergirse en un universo donde la naturaleza, la historia y la cultura se entrelazan para ofrecer al visitante una experiencia inolvidable. Entre los valles y montañas de esta región del norte de España, se esconde un lugar que podría confundirse fácilmente con un paisaje sacado de una postal suiza. Se trata de un paraíso escondido que, gracias a su belleza sobrecogedora, se ha convertido en un must para aquellos que buscan conectar con la naturaleza en su estado más puro. Pero Asturias no solo atrae por sus paisajes; su riqueza culinaria y su patrimonio histórico la convierten en un destino completo para todos los gustos.
En el corazón de esta tierra, una pastelería fundada en 1914 sigue endulzando la vida de locales y visitantes. Conocida por sus duquesitas y carbayones, esta joya de la gastronomía asturiana ofrece delicias que pueden ser degustadas por menos de 5 euros, haciéndola accesible a todos los bolsillos. Su reconocimiento, reflejado en un Solete, certifica la calidad y el amor puesto en cada uno de sus productos, siendo un imperdible para los amantes del buen comer.
Además, el puente de diciembre se presenta como una oportunidad perfecta para descubrir otra faceta de Asturias, más vinculada al mundo del coleccionismo y la nostalgia. El histórico palacete Villa María, localizado en Somió, abrirá sus puertas para transformarse en el epicentro de un mercadillo único. Antigüedades, objetos de colección y piezas raras estarán disponibles desde solo 1 euro, convirtiendo este evento en el lugar ideal para encontrar ese objeto especial que añadir a cualquier colección.
Este mercado, que tendrá lugar durante los dos próximos fines de semana del 6 al 9 de diciembre, no es una simple feria de antigüedades. Su organización corre a cargo de Francisco Javier Sitges, el propietario de la mansión, en colaboración con Orden Vintage, prometiendo atraer a curiosos y coleccionistas en busca de tesoros ocultos. La mansión, con un precio que ronda los 5 millones de euros, revela no solo la pasión de Sitges por los mercados de antigüedades y objetos heredados, sino también una historia familiar ligada al arte y la aristocracia.
El evento también contempla una dimensión solidaria, pues parte de lo recaudado se destinará a causas locales. Esta acción convierte la visita en una experiencia aún más especial, permitiendo a los asistentes contribuir con la comunidad mientras disfrutan de la historia y belleza de este lugar emblemático.
Visitar Villa María durante el mercado vintage es una oportunidad única para explorar una de las casonas más emblemáticas de Asturias, mientras se busca entre objetos llenos de historia. Su arquitectura, que combina estilos eclécticos con influencias neoclásicas y barrocas, y sus jardines de estilo inglés, ofrecen el escenario perfecto para una jornada inolvidable. Esta mansión, que ha sido testigo de la vida de la aristocracia asturiana y ha albergado a figuras destacadas de la sociedad española, se convierte hoy en un puente entre el pasado y el presente, invitando a todos a ser parte de su historia.
