El entrenador del Tottenham, Jose Mourinho, estalló contra su equipo tras el empate 3-3 ante el Southampton en la Premier League. El Tottenham había ido ganando 1-3 en la segunda mitad, pero dejó que el Southampton remontara en los minutos finales. Mourinho criticó a sus jugadores por haber sido demasiado pasivos en defensa, y por no haber mantenido la concentración durante todo el partido.
Mourinho dijo que su equipo había dado «regalos» al Southampton, y que la actuación había sido «ridícula» en algunos momentos. Criticó a su defensa por no haber sido suficientemente agresiva, y también a los jugadores del centro del campo por no haber protegido bien la defensa. Dijo que su equipo había perdido la concentración en los minutos finales, lo que había permitido al Southampton marcar dos goles para empatar el partido.
El entrenador portugués también tuvo palabras de crítica para sus delanteros, diciendo que habían desperdiciado varias oportunidades para marcar en la segunda mitad. Dijo que el equipo necesitaba ser más eficaz en ataque, y que no podían permitirse el lujo de fallar tantas ocasiones.
A pesar de su enfado, Mourinho también reconoció que el Southampton había jugado bien, y que el empate era justo en general. Sin embargo, dijo que su equipo debería haber sido capaz de cerrar el partido después de haber ido ganando 1-3.
El empate deja al Tottenham en la quinta posición de la tabla de la Premier League, con 7 puntos en cuatro partidos. A pesar de que todavía es demasiado pronto para hacer valoraciones definitivas, Mourinho sabe que su equipo tendrá que mejorar si quiere competir por los primeros puestos de la tabla.
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