El mercado inmobiliario en Cataluña ha experimentado un notable incremento en la primera mitad de 2023, según el informe semestral de precios de venta de pisos.com. La vivienda de segunda mano en la región mostró un precio medio de 2.610 euros por metro cuadrado en junio, lo que representa un aumento del 1,35% en comparación con diciembre de 2022. En un año, el precio ha subido un 2,53%, el tercer aumento más moderado en España.
A pesar de estos incrementos, Cataluña ha experimentado el ajuste mensual más grande de todas las autonomías con un descenso del 1,50% en junio, mientras que su incremento trimestral del 0,58% ha sido el más leve del país. Aún así, Cataluña se sitúa como la cuarta región más cara de España, detrás de Baleares con un precio medio de 4.076 euros por metro cuadrado.
Ferran Font, director de Estudios, resalta la robustez del mercado inmobiliario, a pesar del enfriamiento del sector hipotecario. Destaca que «estamos viendo que, de un año a otro, solo cinco capitales españolas han ajustado sus precios», reflejando la fortaleza del mercado.
En cuanto a la financiación, Font sostiene que «el impacto del aumento de las tasas de interés es visible en el incremento del costo de las hipotecas». Agrega que «la emisión de préstamos hipotecarios también está disminuyendo, pero el principal obstáculo para la demanda es el precio de la vivienda».
Al observar los municipios y provincias específicas, todas las provincias catalanas han experimentado aumentos en el primer semestre. Lleida, con un aumento del 7,96%, se situó como la tercera provincia española que más creció durante este período. En términos de precios, Barcelona fue la provincia más cara de la región con un costo de 2.962 euros por metro cuadrado.
Las capitales catalanas también han experimentado incrementos durante la primera mitad del año. Lleida, con un crecimiento del 5,06%, ha sido la que más ha crecido en la región. Barcelona, con un precio de 4.426 euros por metro cuadrado, se situó como la tercera capital provincial más cara de España.
Por último, entre los municipios catalanes, La Seu d’Urgell registró el sexto crecimiento semestral más alto del país, mientras que Sitges se clasificó como el décimo municipio más caro en general. En el extremo opuesto, Balaguer fue el municipio más económico de Cataluña.