En la última jornada de declaraciones vinculadas al sobresaliente caso Begoña Gómez, las piezas del rompecabezas judicial parecen tomar un nuevo giro. Las acusaciones populares han solicitado formalmente al juez del Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid que requiera la nueva comparecencia del empresario Juan Carlos Barrabés; no obstante, esta vez exigen que sea en calidad de investigado y no meramente como testigo como ha sido hasta ahora.
Este pedido se respalda en lo que las acusaciones populares han descrito como una «falta de concreción» y unas «continuas respuestas evasivas» por parte de Barrabés durante su declaración, lo que a su entender justifica una modificación en su situación procesal. Dicho cambio, promovido por las acusaciones populares dirigidas por Vox, apunta a permitir a Barrabés ejercer a plenitud su derecho de defensa frente a los hechos que se le endilgan.
Según se desprende de las declaraciones realizadas, la labor profesional y empresarial de Begoña Gómez, en el punto de mira de esta investigación, habría estado estrechamente ligada e incluso habría tenido una trascendencia especial con el empresario Barrabés. Este vínculo se encontraría principalmente en la participación de Barrabés, de manera personal o mediante socios y empleados, como una pieza clave en la adjudicación de contratos administrativos y en los proyectos desarrollados por Gómez con relación a la Universidad Complutense de Madrid.
Otro tema que ha llamado la atención en este procedimiento es el reconocimiento por parte de Barrabés de haber mantenido varias reuniones en el Palacio de La Moncloa, algunas de ellas bajo la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Estos encuentros habrían girado en torno a discusiones sobre innovación, aunque Barrabés ha manifestado dificultades para recordar las fechas específicas de dichas reuniones.
Este nuevo giro en el caso promete profundizar en la investigación, buscando esclarecer la participación y el alcance de las acciones de Barrabés en relación con las actividades de Begoña Gómez, así como también las implicancias de sus encuentros en La Moncloa. La insistencia en cambiar la situación de Barrabés de testigo a investigado subraya la importancia que las acusaciones populares otorgan a su testimonio y la necesidad de profundizar en su involucramiento. La continuación de este caso seguirá generando atención mediática y legal dado los entramados políticos y empresariales que aparentemente se están desenmarañando.
