El cese del coronel Diego Pérez de los Cobos como jefe de la Guardia Civil en Madrid en mayo de 2020 ha sido declarado ilegal por el Tribunal Supremo. Esta decisión se aclara en la sentencia del alto tribunal después de que el Ministerio del Interior diera explicaciones “confusas” y se basara en “razones distintas de las aducidas para justificarlo”, según indica el informe.
El cese se produjo días después de que se conociera el envío, sin conocimiento previo de Interior, de un informe de la Guardia Civil a la juez que investigaba la convocatoria de actos multitudinarios como la manifestación del 8-M, Día de la Mujer, poco antes de decretarse el estado de alarma por la COVID-19. Pérez de los Cobos no informó al ministerio de esas investigaciones porque “estaba expresamente prohibido por la magistrada que dirigía” el caso, según aclara el Tribunal Supremo.
Esta sentencia es un triunfo para el coronel Pérez de los Cobos y sus defensores, ya que se ha demostrado que su cese fue “una decisión política” y que se vulneró su derecho a la libertad de expresión. Además, su caso ha levantado la cuestión sobre la independencia de los cuerpos de seguridad y la relación del Ministerio del Interior con la Justicia en España.
En este sentido, el hecho de que una información como el informe de la Guardia Civil sobre los actos multitudinarios no se haya comunicado al Ministerio del Interior previamente demuestra que existe poca transparencia y colaboración en la labor de los cuerpos de seguridad y las autoridades. Pérez de los Cobos alegó en su defensa que siguió el protocolo establecido y que su actuación fue correcta, pero su cese demuestra que hay intereses políticos en juego que pueden interferir en la independencia de los cuerpos de seguridad.
La sentencia del Tribunal Supremo también puede tener consecuencias para casos futuros en los que se produzcan ceses de jefes de la Guardia Civil o de otros cuerpos de seguridad de manera unilateral y sin justificación suficiente. Es importante que los cuerpos de seguridad trabajen de manera autónoma y sin interferencias políticas para garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
En definitiva, la sentencia del Tribunal Supremo sobre la ilegalidad del cese del coronel Pérez de los Cobos como jefe de la Guardia Civil en Madrid es una victoria para él y su defensa, pero también pone en cuestión la independencia de los cuerpos de seguridad y la transparencia en su labor. Esperamos que esta decisión sirva para fortalecer la autonomía de los cuerpos de seguridad y garantizar su independencia en el futuro.
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