En un giro significativo de los acontecimientos para el sector del transporte público en España, la Confederación Sindical de Comisiones Obreras (CCOO) ha decidido desconvocar la huelga de autobuses programada para este jueves, 5 de diciembre. No obstante, el sindicato mantiene su llamado a la huelga para el próximo lunes 9 de diciembre, enfatizando su intención de seguir con acciones de carácter indefinido a partir del 23 de diciembre si sus demandas no son atendidas. Estas acciones se enmarcan dentro de un contexto más amplio de luchas por la jubilación anticipada en el sector, argumentando causas de peligrosidad asociadas con su labor.
La Unión General de Trabajadores (UGT) se ha desmarcado de esta convocatoria tras llegar a un acuerdo con las principales patronales Confebús, Anetra y Atuc. El acuerdo propone solicitar ante las autoridades la implementación de la jubilación anticipada para los conductores de autobuses, medida que aún espera la aprobación de una normativa gubernamental específica, sin que se haya precisado una fecha para ello.
CCOO critica la inacción de las patronales, especialmente la CETM o Fenadismer, que no han cumplido con el plazo de 20 días acordado el pasado 24 de octubre para pedir oficialmente esta medida de jubilación anticipada. Este incumplimiento ha reforzado la decisión del sindicato de continuar con las movilizaciones previstas.
El sindicato también ha señalado directamente a grandes empresas como Alsa y Avanza, acusándolas de defender sus intereses económicos a través del control efectivo de las patronales Confebús y, de manera indirecta, de Atuc. Según CCOO, estas entidades priorizan los intereses de estas empresas por encima de los de los trabajadores, situación que ha exacerbado el conflicto.
Frente a este escenario, el sindicato ha solicitado el apoyo y la intervención de los ayuntamientos de las principales ciudades españolas y del Ministerio de Transportes. Buscan que estas autoridades supervisen el proceso y encuentren una solución al conflicto, sin dejarlo en manos exclusivamente de las concesionarias Alsa y Avanza. CCOO manifiesta su preocupación por que las concesiones sigan generando beneficios para estas empresas mientras los trabajadores están en huelga y no pueden prestar servicios.
Mientras tanto, en una nota relacionada con el sector del transporte público en Madrid, se anuncian buenas noticias con la introducción de nuevas líneas de autobús que prometen mejorar la conectividad entre diferentes barrios de la capital, una medida que puede ser un alivio parcial para algunos usuarios, en medio de las tensiones laborales y las huelgas anunciadas.