La Feria del Libro de Santurtzi es la segunda en importancia de Bizkaia, después de la de Bilbao. Es una feria muy asentada en el calendario cultural de Bizkaia, y es muy importante tanto en participación como en ventas. En ella, mañana viernes, día 13 de mayo, a las 18,00 horas, Juan Camacho, vecino de Basauri y de origen valdepeñero, firmará ejemplares de su poemario ‘Y volverá el hombre’, editado por Ediciones C&G, en el stand de la librería Sorgin de Sestao.
Desde mañana y hasta el 22 de mayo, en el Parque Central, se celebra la Feria del Libro de Santurtzi, la segunda en importancia de Bizkaia, que cuenta con una decena de stands, entre ellos el de la librería Sorgin de Sestao, donde el conocido poeta basauritarra, de origen valdepeñero, Juan Camacho, firmará ejemplares de su obra “Y volverá el hombre”, el viernes 13 de mayo, a las 18,00 horas.
Juan Camacho Quintana, nació en 1956, reside desde hace décadas en Basauri (Bizkaia), donde ha desarrollado una «intensa vida literaria». Utiliza conceptos metafísicos para definir y profundizar en su poesía tales como Dios, el dolor, el hombre, el mundo y el alma que designa la fuerza vital, dándole la perspectiva de la constante lucha por la visión humana del hombre, que engloba la percepción del pensamiento, la conciencia, la memoria y la imaginación.
Juan Camacho, además de “Y volverá el hombre” tiene publicados otros dos poemarios “El Dios del olvido” y “Trasvase de palabras a un soneto”, además de una obra de teatro y numerosos artículos de opinión en periódicos nacionales.
En “Y volverá el hombre”, Camacho, sobre todo, ensalza el amor en un libro reivindicativo, con una poesía social para reflexionar, donde el autor destaca los compromisos que tiene el hombre para el hombre, sumergiendo al lector en la vorágine de su propio interior a veces atormentado, otras enamorado y otras esperanzado.
Tomás López Fdez-Sacristán, dice de Juan Camacho, que tiene “una manera de entender la literatura y el arte en general, desde el compromiso amplio con el ser humano. Los sentimientos y las emociones no son completamente personales, sino que en cierto modo pertenecen también a la colectividad. Trascender la subjetividad del individuo y reconocer el ser que piensa en el otro”.