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El panorama político catalán sigue siendo incierto tras las elecciones del pasado 14 de febrero. Tras dos meses de negociaciones, se empiezan a conocer algunos nombres que podrían ser clave para formar el nuevo gobierno catalán.

Uno de ellos es el de Anna Erra, alcaldesa de Vic y candidata de Junts per Catalunya. Según fuentes de su partido, se baraja su nombre para presidir el Parlamento catalán. Erra es licenciada en Derecho y actualmente también es miembro de la Ejecutiva Nacional de su partido. Si finalmente fuera elegida presidenta del Parlament, sería la primera mujer en ocupar este cargo.

Otro de los nombres que suenan con fuerza es el de Jaume Giró, exconsejero de Economía en el gobierno de Carles Puigdemont y hasta hace unos días director general de la Fundación Bancaria «la Caixa». Giró es considerado un técnico de reconocido prestigio y su nombre ha sido propuesto por Junts per Catalunya para ser el futuro conseller de Economía. Eso sí, antes deberá superar el veto de Esquerra Republicana, el otro gran partido independentista.

Por último, hay que mencionar a Josep Rull, uno de los hombres fuertes de Junts per Catalunya y también exconsejero en el gobierno de Puigdemont. Rull, que actualmente se encuentra en prisión preventiva por el caso del proceso independentista, se ha postulado como candidato a la presidencia de la Generalitat en caso de que Carles Puigdemont no pueda volver a Cataluña. No obstante, su candidatura enfrenta muchos obstáculos legales y políticos debido a su situación actual.

En cualquier caso, la formación del nuevo gobierno catalán se presenta complicada. Los dos principales partidos independentistas, Junts per Catalunya y Esquerra Republicana, no logran ponerse de acuerdo en cuestiones clave como la estrategia a seguir para conseguir la independencia. Además, ambos partidos tienen ciertos conflictos internos que dificultan aún más las negociaciones.

Por otro lado, el partido socialista y Ciudadanos, que fueron los grandes perdedores de las elecciones catalanas, tampoco parecen dispuestos a apoyar a ninguna de las dos formaciones independentistas. Por lo tanto, se baraja la posibilidad de que se celebren nuevas elecciones en caso de que no haya acuerdo para la formación del gobierno.

En definitiva, el panorama político catalán sigue siendo incierto y la formación del nuevo gobierno parece estar todavía muy lejos de conseguirse. No obstante, algunos nombres empiezan a sonar para ocupar cargos clave en la futura administración catalana. Habrá que estar atentos a las próximas negociaciones para ver cómo se resuelve este difícil puzle político.

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