En el Palacio de Congresos y Exposiciones (FIBES) de Sevilla, el presidente del Gobierno español, en presencia del secretario general de la ONU, António Guterres, ha manifestado la firme dedicación de España hacia un modelo económico sostenible que integra la rentabilidad económica, la sostenibilidad medioambiental y la justicia social. Ha enfatizado la importancia de colaboraciones entre el sector público y privado para alcanzar un desarrollo sostenible, además de anunciar una mayor inversión como necesidad inminente.
Medidas en tres grandes ejes
Sánchez ha delineado un plan de acción en tres ejes principales para alentar la inversión empresarial. El primer eje se concentra en la reducción y compartición de riesgos a través de varios instrumentos de financiación. El segundo aboga por apoyar los proyectos de colaboración público-privada en ámbitos críticos como la educación y la economía verde. El último eje llama a reformar el sistema financiero internacional para que fomente eficazmente el desarrollo sostenible.
Más inversión y sistemas fiscales sólidos
Dirigiéndose a los empresarios, Sánchez solicitó un compromiso con los países en desarrollo, con un enfoque particular en inversiones sostenibles a largo plazo. Destacó la importancia de los sistemas fiscales sólidos en estos países, como base para construir servicios públicos esenciales y garantizar la inversión. Terminó su intervención con un llamado a acción global para combatir la pobreza, el cambio climático y la volatilidad financiera, beneficiando tanto a los países en desarrollo como a los más industrializados.