En un giro político inesperado, el PSOE ha optado por respaldar una iniciativa del Partido Popular (PP) en el Congreso, que desafía la gestión unilateral del Presidente Pedro Sánchez en asuntos de política exterior. Esta decisión, calificada por muchos como surrealista, tiene como objetivo aumentar la presencia y las explicaciones del presidente del Gobierno ante el Parlamento.
La proposición de ley del PP, que ha recibido un respaldo masivo de 302 votos a favor, incluyendo el apoyo no solo del PSOE, sino también de Vox, ERC, y Junts, plantea la necesidad de que el presidente comparezca en el Congreso antes de los Consejos Europeos para discutir las cuestiones comunitarias. Esta medida busca modificar la práctica actual, donde Sánchez informa al Parlamento después de estos encuentros. Sin embargo, surge la preocupación de que, a pesar de la amplia aprobación inicial, la propuesta pueda quedar estancada en un bucle de enmiendas, especialmente con la mayoría del PSOE y Sumar en la Mesa de la Cámara Baja.
Durante el debate, el portavoz del PSOE, Sergio Gutiérrez, criticó fuertemente al PP por cuestionar el liderazgo de Sánchez en política exterior, recordando la controvertida decisión del gobierno de José María Aznar de participar en la guerra de Irak, una acción que fue tomada sin la aprobación del Parlamento y con una vasta oposición pública. A pesar de esta crítica preliminar, Gutiérrez concluyó su intervención señalando que su partido está abierto a debatir sobre política exterior, insinuando así el posterior apoyo socialista a la proposición.
Esta iniciativa llega en un momento crítico para el gobierno de Sánchez, quien recientemente se ha visto envuelto en una crisis diplomática con Argentina y ha tomado la decisión de reconocer al Estado de Palestina, una acción que ha generado reacciones adversas a nivel internacional. El PP ha expresado su descontento con la manera en que se han manejado estas y otras decisiones de política exterior, argumentando la falta de coordinación y consenso con el Parlamento.
La decisión del PSOE de alinearse con el PP en esta cuestión subraya las complejidades y contradicciones dentro de la política española, particularmente en lo que respecta a la gestión de la política exterior del país. Ahora, con una mayoría abrumadora a favor de la propuesta, el foco se centra en los siguientes pasos del proceso legislativo y en cómo esta singular alianza afectará la dinámica política del país y la administración de su política exterior.
