Congreso de los Diputados, Madrid
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido en el Congreso de los Diputados la política migratoria que el Ejecutivo ha desplegado en los últimos años y ha anunciado medidas en este ámbito, estrechamente vinculado, según el líder del Ejecutivo, al reto demográfico y el crecimiento económico.
El presidente ha asegurado que la política migratoria desarrollada «funciona», aborda las tensiones generadas por este fenómeno y refleja que «acoger al que viene de fuera buscando una vida mejor no es sólo un deber al que nos obliga el derecho internacional, sino también un paso esencial para garantizar la prosperidad y la sostenibilidad de nuestro Estado del Bienestar».
Pedro Sánchez, que ha comparecido en el Pleno del Congreso a petición de todos los grupos parlamentarios para abordar la cuestión migratoria, ha evocado durante su intervención la historia de España como «país de migrantes» y ha desgranado a continuación los retos que plantea este fenómeno y los principales ejes de actuación del Gobierno en la materia.
Herramientas frente al reto demográfico
De acuerdo con el presidente, la gestión eficaz de esta cuestión es una de las dos herramientas que contribuirán a superar el reto demográfico. Con una densidad poblacional por debajo de la media europea y casi la mitad de los municipios en riesgo de despoblación, «España tiene tanto la necesidad como la capacidad de integrar», ha asegurado.
Sobre la otra herramienta frente al reto demográfico, el impulso de los nacimientos, ha anunciado que, en las próximas semanas, el Gobierno intentará alcanzar un acuerdo para aprobar una nueva Ley de Familias que «ampliará los derechos de las familias monoparentales, numerosas, migrantes y con algún miembro con discapacidad».
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados. | Congreso
Desafíos de la política migratoria
En relación con los desafíos que afronta la política migratoria, el presidente se ha referido en primer lugar a los picos de llegadas irregulares, como el que se está viviendo actualmente en las Islas Canarias.
Pedro Sánchez ha recordado que estos aumentos de llegadas al territorio español -un 50% más en el último año- son comunes a otras rutas de entrada en Europa y se explican con factores como la inestabilidad en el Sahel o la crisis climática. En este punto, el líder del Ejecutivo ha trasladado un mensaje de agradecimiento a la población canaria por «el ejemplo diario de humanidad» que refleja su comportamiento durante la crisis migratoria que vive el archipiélago.
A propósito de la necesidad de mejorar la integración «efectiva» y la «plena» convivencia de los migrantes, el presidente ha reconocido que las diferencias culturales pueden generar fricciones y ha asegurado que el fracaso de otros países en esta cuestión debe impulsar el desarrollo de un «modelo español de éxito», tal y como ha ocurrido en otros ámbitos como el laboral o el energético.
También se ha referido al reto de la desinformación, un problema que «pone en juego la tolerancia y la solidaridad como ejes vectores de nuestra sociedad» y, con ello, la prosperidad económica. «En los últimos diez años, el 94% de los migrantes que han venido a España lo han hecho de forma totalmente legal y regulada, sólo un 6% lo hizo de forma irregular», ha recordado. Y añade: «España tiene que elegir entre ser un país abierto y próspero, o un país cerrado y pobre».
Ejes de la política migratoria: refuerzo de fronteras y sistema de acogida
Pedro Sánchez ha explicado que la política migratoria del Gobierno que preside se ha articulado en cinco ejes de acción para abordar estos desafíos, con el refuerzo de las fronteras y el sistema de acogida como primer frente de actuación.
El presidente ha recordado que en los últimos 6 años se han multiplicado por cinco las plazas del sistema de acogida hasta alcanzar las 50.000, se ha incrementado en un 12% el número de agentes de Policía Nacional y Guardia Civil en Canarias, y se han transferido, sólo en el presente año, 35 millones de euros adicionales a las comunidades autónomas para atención a menores no acompañados.
«En esta legislatura, seguiremos avanzando en esta misma dirección. Con más recursos para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con 6.000 nuevas plazas en los centros de acogida, con más apoyo a aquellas comunidades que lo necesiten», ha adelantado.
Migración legal, segura y ordenada
El segundo eje de la política migratoria señalado por Pedro Sánchez es el fortalecimiento de los instrumentos que permiten una migración legal, segura y ordenada, porque «sabemos -ha asegurado- que esa es la mejor forma de acabar con la migración irregular y las miserias asociadas a ella».
Dentro de este fortalecimiento, el presidente del Ejecutivo ha destacado el impulso en la presente legislatura de la agilización de la homologación de títulos académicos de quienes vengan a trabajar a España y un nuevo programa de migración laboral para facilitar las contrataciones en origen con países como Mauritania, Gambia, Senegal o Guatemala.
Asimismo, Pedro Sánchez ha anunciado que el próximo mes se elevará al Consejo de Ministros una reforma del Reglamento de Extranjería para agilizar los procesos de los migrantes que ya residen en España y ordenar nuevas figuras de arraigo entorno al empleo y las redes familiares.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. | Congreso
Implicación de la UE e impulso de la integración
El jefe del Ejecutivo ha subrayado, como tercer eje de la política migratoria, «una política corresponsable y solidaria en Bruselas, exigiendo que toda Europa se implique de manera efectiva en la gestión de los flujos migratorios que recibimos los países mediterráneos.»
Para ello, Pedro Sánchez ha avanzado la petición a la Comisión Europea del adelanto a verano de 2025 de la entrada en vigor de las herramientas de control fronterizo y reparto de personas migrantes del Pacto de Migración y Asilo, para lo que ha señalado que se va a contar con las ONG y asociaciones civiles.
Como cuarto eje de acción de la política migratoria del Gobierno, el presidente ha señalado la integración de los inmigrantes que se instalan en España, para lo que ha adelantado la puesta en marcha en las próximas semanas de un plan nacional de integración y convivencia intercultural. «Vamos a implementar estrategias de integración para la inclusión basadas en los derechos humanos y que fortalezcan una España diversa y cohesionada», ha afirmado.
Ayuda a los países de origen
El quinto eje de acción supone seguir fomentando el desarrollo económico de los países latinoamericanos y africanos de procedencia, ya que «las personas no dejan sus casas porque les den una cama en un centro de acogida, sino porque huyen de la miseria y la violencia, y porque ven que en España y en Europa hay futuro».
Con este objetivo, el presidente del Gobierno ha recordado que se ha triplicado la ayuda al desarrollo en los países del Sahel y duplicado el presupuesto de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, que ha pasado de 360 a 700 millones de euros. También se ha impulsado la estrategia España-África 2025-2028, con más de cien medidas para fomentar el desarrollo económico de ese continente, junto a otras medidas en el marco de la Unión Europea y la ONU.
«Los españoles somos hijos de la migración, no seremos padres de la xenofobia. Hagamos una política migratoria de la que nuestros mayores puedan sentirse orgullosos. Y hagamos una política migratoria que garantice el futuro de sus nietos», ha concluido el presidente del Gobierno.