En una operación llevada a cabo por la Guardia Civil de Valencia, dos individuos han sido arrestados bajo la sospecha de haber robado donaciones destinadas a las víctimas de la devastadora dana que azotó la región el 29 de octubre. Este evento, cuyos daños aún resuenan en la comunidad, movilizó a la población a aportar generosamente en forma de equipos informáticos, electrodomésticos de cocina y alimentos, entre otros.
Los sospechosos, de 19 y 20 años y de nacionalidades rumana y española, fueron capturados en el barrio de la Torre, en Valencia, tras una investigación llevada a cabo por el Área de Investigación de Paiporta. La detección de estas personas se facilitó después de analizar las grabaciones de las cámaras de seguridad, notar una similitud en el modus operandi de los delitos, y establecer una conexión entre las fechas, horas y localizaciones de los robos reportados.
Aparte de involucrarse en el robo de donativos, durante el arresto y el registro domiciliario efectuado el 6 de marzo de 2025, los investigadores descubrieron una plantación indoor de cannabis sativa. En una de las habitaciones acondicionadas para el cultivo, se encontraron 66 plantas en estado de floración, junto con equipos necesarios para su desarrollo, como extractores, filtros, iluminación y sistemas de riego por goteo. Además, se observó que el detenido había manipulado ilegalmente el suministro eléctrico para potenciar su actividad ilícita.
La acción de la Guardia Civil no solo sacó a la luz el robo a los afectados por la dana y el cultivo ilegal de marihuana, sino que también reveló esfuerzos del dúo por silenciar a sus víctimas. Algunos de los denunciantes recibieron llamadas con número oculto, donde se les coaccionaba para retirar sus denuncias bajo amenaza de represalias.
Los detenidos enfrentan ahora cargos por robo con fuerza, coacciones, defraudación de fluido eléctrico, y contra la salud pública por el cultivo y elaboración de drogas. La instrucción del caso ha sido turnada al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 12 de Valencia, donde se determinará el futuro legal de estos individuos.
Este incidente ha causado consternación en la comunidad, evidenciando una vez más la vulnerabilidad de los actos solidarios frente a la delincuencia. La rápida actuación de las autoridades ha sido un alivio para los afectados y un recordatorio de la importancia de la vigilancia y la seguridad en la gestión de ayudas de emergencia.