El PP moviliza a sus bases con un mensaje de regeneración y oposición frontal al gobierno de Sánchez
Actualizado: 31/05/2025 – 13:26
Zaragoza ha sido el escenario elegido por Alberto Núñez Feijóo para lanzar un mensaje contundente: el Partido Popular no se conforma con esperar a que el Gobierno de Pedro Sánchez "se derrumbe solo". En un acto rodeado de la cúpula territorial del partido, el líder popular ha subrayado la necesidad de "despertar la conciencia colectiva" y ofrecer una alternativa ante lo que califica como una etapa de "degradación política".
"No queremos mafia, queremos democracia", ha afirmado Feijóo, en referencia a los escándalos que rodean al Ejecutivo, mientras anunciaba una gran manifestación convocada para el 8 de junio en Madrid. Una protesta que, según él, trasciende las siglas del PP: "Esperamos a todos los que estén hartos". La movilización, respaldada por expresidentes como Mariano Rajoy y José María Aznar, busca capitalizar el descontento con la coalición PSOE-Sumar, acusada por los populares de priorizar "pactos de supervivencia" sobre las necesidades ciudadanas.
El congreso del PP previsto para julio en la capital se perfila como el próximo gran hito. Feijóo lo define como un "punto de inflexión" para articular un proyecto que, asegura, ya ha demostrado su eficacia en las comunidades autónomas gobernadas por su partido. "Hemos bajado impuestos en 6.000 millones y ganado cuatro elecciones consecutivas", ha recordado, contrastando la "fuerza territorial" del PP con lo que considera un PSOE fracturado: "Han expulsado a los buenos y promovido a los mediocres".
Entre las promesas destacadas, el líder popular ha garantizado la reversión de las "97 subidas fiscales" aprobadas por el Gobierno y ha insistido en que su objetivo no es "adueñarse del partido, sino devolverlo a las bases". Con la legislatura tocando a su fin, el PP apuesta por un discurso de unidad y regeneración mientras espera que los acontecimientos judiciales y políticos s erosionen aún más la imagen de Sánchez.
En la mira: los votantes desencantados
El cálculo es claro: atraer no solo al electorado tradicional, sino también a ese "PSOE huérfano" que, según Feijóo, añora la etapa previa al actual liderazgo socialista. La crítica al "clientelismo" y la promesa de reducir impuestos para jóvenes y rentas bajas buscan seducir a un espectro amplio. Mientras, el 8-J se antoja como la primera gran prueba de fuerza en la calle.
[Foto: Alberto Núñez Feijóo, junto a barones del PP. (Europa Press/Alberto Ortega)]