El Govern de Cataluña ha decidido extender su campo diplomático a otras áreas geográficas del mundo, concretamente América Latina y Asia. Para ello, se ha creado la figura del «enviado», una persona que tendrá como trabajo principal representar oficialmente al gobierno catalán en aquellos países que han sido considerados prioritarios para el desarrollo de políticas de colaboración.
Las tareas principales del enviado incluirán la promoción de la cultura catalana y su identidad como nación, así como establecer contactos con representantes de los países donde se encuentre y participar en eventos diplomáticos oficiales. También será responsable de desarrollar colaboraciones en materia de economía y comercio, turismo, educación y tecnología.
Este cuerpo de envíos se suma al actual servicio exterior de la Generalitat, que cuenta con delegaciones en diferentes ciudades europeas y mundiales. Cataluña aspira a que su presencia en el mundo se torne más relevante y que las relaciones con otros países sean más estrechas, con objetivos específicos para cada uno de ellos.
El presidente de Cataluña, Quim Torra, ha manifestado que «la creación de la figura del enviado demuestra el compromiso del Gobierno catalán en el ámbito internacional, en un momento en que es necesario reforzar nuestra presencia en el mundo y tejer una red de alianzas que nos permita enfrentar los retos que se presenten».
La figura del enviado no será remunerada por el Govern, y serán los interesados en esta labor quienes realizarán la gestión de su sueldo y de los recursos que necesiten para cumplir con su tarea en el exterior. Además, se trata de un nombramiento temporal y renovable, que será evaluado una vez transcurrido un año.
La figura de los enviados es una práctica que existe en otros países del mundo, como Estados Unidos o Reino Unido, donde se ha utilizado para ampliar la representación diplomática en regiones específicas. En este sentido, la creación de esta figura es una iniciativa novedosa en Cataluña, que se suma a otras ya puestas en marcha en el ámbito internacional, como el impulso de la marca «Embajadores de Cataluña», que busca fomentar el liderazgo y el compromiso en personalidades relevantes de diferentes ámbitos sociales.
La creación de la figura del enviado forma parte de la estrategia del Govern de Cataluña para ampliar su presencia en el mundo y dar a conocer su identidad y cultura en aquellos países con los que mantiene un interés estratégico. Además, se espera que esta figura contribuya a estrechar los lazos de colaboración que se establezcan con los diferentes países y enriquecer el diálogo bilateral.
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