La UEFA ha confirmado que abrirá una investigación en relación al caso Negreira, lo que podría acarrear sanciones al FC Barcelona si se comprueba que los pagos realizados al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), José María Enríquez Negreira, estaban destinados a influir en los resultados de los partidos.
Sin embargo, la UEFA no es ajena a casos de este tipo, y en 2007 modificó el apartado 3 del artículo 50 de su Reglamento Disciplinario para poder excluir de las competiciones a los clubes que incurrieran en delitos similares. Este cambio de reglamento permitió a la UEFA tener más independencia y libertad a la hora de tomar decisiones en los casos de amaño de partidos, más allá de las decisiones tomadas por las federaciones y la justicia de cada país.
En los últimos años, la UEFA ha sancionado a seven clubes por influir en los resultados de los partidos, entre los que se incluyen el Olympique Marsella en 1993 o Fenerbahçe y Besiktas en 2011. Todos estos clubes fueron excluidos de las competiciones europeas, con sanciones que oscilaron entre una y tres temporadas.
El cambio de reglamento fue impulsado después de dos casos que escaparon a la sanción de la UEFA. En el primero de ellos, el club belga Anderlecht sobornó al excolegiado español Emilio Guruceta durante las semifinales de la Copa de la UEFA de 1981 ante el Nottingham Forest. Anderlecht reincidió en 1983 en un partido contra el Banik Ostrava, pero el TAS aceptó su recurso y la sanción de la UEFA quedó anulada.
El segundo caso fue el del Milan en 2007. El club italiano fue sancionado con la pérdida de puntos por un caso de amaño de partidos que implicó a otros clubs como la Fiorentina, Reggina, Lazio y Juventus, que llegó a perder la categoría. Sin embargo, esta medida no le impidió participar en la Champions League y el Milan ganó el trofeo.
La sanción a los clubes que influyen en los resultados de los partidos es la exclusión de las competiciones europeas por un mínimo de un año. Es decir, la UEFA no toma a la ligera este tipo de actuaciones, y si se demuestra que el FC Barcelona ha influido en los resultados de los partidos, tendrá que hacer frente a severas sanciones.
Por tanto, esperamos que la investigación de la UEFA sea exhaustiva y justa, y que se tomen las medidas necesarias para erradicar este tipo de corrupción del deporte. Los aficionados merecen competiciones deportivas justas y limpias, y es responsabilidad de los organismos reguladores del fútbol garantizar que se mantenga dicha integridad.
Esta noticia es un resumen informativo de noticias, puedes ampliar esta información puedes buscar en Google News o tu diario online favorito.
