Agroseguro comienza hoy, 14 de julio, a abonar las indemnizaciones por los daños sufridos en la cosecha 2022 de cultivos herbáceos, con 32,61 millones de euros, correspondientes a los siniestros sufridos en más de 350.000 hectáreas de cultivo asegurado, mayoritariamente cereal de invierno, ya que, al ser el cultivo más extendido, es también el que más daños presenta.
Con el objetivo de realizar las tasaciones y el pago de las indemnizaciones a los productores con la mayor rapidez posible, más de 300 peritos están trabajando a pie de campo, lo que se está traduciendo en una reducción del plazo medio de abono de indemnizaciones desde la tasación definitiva del siniestro hasta los 27 días.
Los primeros pagos son para las zonas de producción más temprana
Cataluña es la región que más indemnizaciones recibe en esta ocasión, con 10,57 millones de euros por daños en casi 70.000 hectáreas. La sequía es el riesgo que ha provocado los mayores daños, acumulando 9,41 millones.
A continuación, se sitúa Aragón con 9,55 millones de euros correspondientes a cerca de 83.000 hectáreas. En este caso, han sido las tormentas de pedrisco desde el inicio de la primavera, intensificadas en las últimas semanas, las que han causado los daños más importantes, con pagos por 7,21 millones de euros. También, aunque en menor medida, se han abonado daños por sequía (en total, 1,41 millones).
Por su parte, los productores de Andalucía reciben unas indemnizaciones de 7,76 millones de euros, de los que más de 6 corresponden a la sequía por la escasez de lluvias en los últimos meses.
El resto de las indemnizaciones corresponde a otras zonas de producción temprana de cultivos herbáceos, principalmente Castilla-La Mancha, con 2,45 millones de euros. Los productores de zonas más tardías recibirán las indemnizaciones a partir de la próxima semana.
Precipitaciones irregulares durante el primer semestre del año
La primera mitad de 2022 se ha caracterizado por una marcada irregularidad en las precipitaciones. El invierno vino marcado por su práctica ausencia en todo el territorio nacional, pero las reiteradas lluvias de marzo y abril aliviaron la situación y mejoraron sensiblemente la expectativa de los cultivos herbáceos de secano. Sin embargo, en su etapa final de desarrollo, los meses de mayo y junio se han presentado más cálidos y secos de lo habitual y con la humedad del suelo limitada como consecuencia de las altas temperaturas que se registraron de forma generalizada. Todo ello ha provocado daños por sequía en gran parte de las zonas productoras de cultivos herbáceos y algunos siniestros provocados por tormentas de pedrisco.
Hasta el momento, se han recibido en total cerca de 951.000 hectáreas afectadas por todos los riesgos registrados en la cosecha 2022. La mayoría, unas 840.000, se refiere a daños por sequía, una cifra similar a la registrada en 2019 y sensiblemente inferior a las graves sequías de 2012 y 2017.