Los eminentes oncólogos internacionales, los doctores Javier Román y Javier Cortés, han presentado las más recientes innovaciones en el combate contra el cáncer. Según sus predicciones, las técnicas tradicionales de detección temprana, como las mamografías y colonoscopias, estarán próximamente en vías de ser reemplazadas por análisis de sangre capaces de identificar células tumorales circulantes o material genético derivado de las mismas.
La enfermedad del cáncer, que afecta anualmente a más de 19 millones de personas en todo el mundo por primera vez, es el foco de intensivas investigaciones y progresos médicos a nivel global. «A medida que nos acercamos al futuro», declara el Dr. Javier Román García, director médico asistencial de uno de los equipos más destacados de oncología médica del país, «las perspectivas para el diagnóstico y tratamiento del cáncer son cada vez más alentadoras». Por su parte, el Dr. Javier Cortés, reconocido a nivel mundial como uno de los principales investigadores en cáncer de mama, corrobora que «los expertos en oncología, médicos y científicos, están trabajando incansablemente para desarrollar nuevas técnicas y tecnologías que transformarán radicalmente nuestro enfoque ante esta enfermedad».
Ambos especialistas explican los seis pilares en los que se asientan sus afirmaciones
En primer lugar, se vienen desarrollado terapias dirigidas específicamente para atacar mutaciones genéticas presentes en las células cancerosas. Estos tratamientos se basan en la comprensión de las características moleculares del cáncer y han demostrado ser eficaces en el tratamiento de tumores con mutaciones específicas. Ejemplos de terapias dirigidas incluyen los inhibidores de tirosina quinasa y los inhibidores de PARP utilizados ya para varios tipos de tumores con buenos resultados.
Por otra parte, la medicina de precisión se basa en el análisis detallado de las características moleculares y genéticas de un tumor para personalizar el tratamiento. Esto permite seleccionar terapias más efectivas y evitar tratamientos innecesarios. La medicina de precisión ha mejorado la eficacia de los tratamientos y ha llevado a mejores resultados en pacientes con cáncer. Además, la posibilidad de sustituir las biopsias tumorales, a veces ubicados en localizaciones de difícil acceso, por células tumorales circulantes en la sangre o por fragmentos de material genético circulante (DNA o RNA), han revolucionado la capacidad de conocer las características de los tumores.
Si bien la cirugía y la radioterapia siguen siendo pilares fundamentales en el tratamiento del cáncer, se han realizado avances significativos en técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas, lo que permite una recuperación más rápida y menos complicaciones, como ocurre con la cirugía robótica. Además, la radioterapia se ha vuelto más precisa y efectiva, reduciendo los efectos secundarios y aumentando la tasa de éxito en la eliminación de tumores.
A esta base científica que avanza se ha unido la inmunoterapia, que ha revolucionado el campo del tratamiento del cáncer. Así se han desarrollado nuevos medicamentos que estimulan el sistema inmunológico para atacar las células cancerosas. Estos medicamentos, como los inhibidores de puntos de control inmunológico, han demostrado ser efectivos en el tratamiento de varios tipos de cáncer, incluyendo a más de 15 tipos de tumores entre los que se encuentran el melanoma, el cáncer de pulmón y el cáncer de riñón.
Pero, como no puede ser de otra forma, recuerdan los doctores Román y Cortés, la detección temprana del cáncer es fundamental para mejorar las tasas de supervivencia. En este ámbito se han desarrollado nuevas pruebas y tecnologías de detección que permiten identificar el cáncer en etapas más tempranas, cuando es más tratable. Esto incluye el uso de pruebas genéticas y marcadores tumorales para detectar cánceres como el cáncer de mama, el cáncer de colon y el cáncer de próstata. En el futuro inmediato, las pruebas de detección precoz convencionales como la mamografía, la colonoscopia…etc se verán suplantadas por análisis de sangre que identificarán a las células tumorales circulantes o material genético derivado de ellas.
Estos avances en la investigación y tratamiento del cáncer que se desarrollan por equipos multidisciplinarios de todo el mundo y con una gran participación de España a través de los doctores que han servido de guía, brindan esperanza a los pacientes y sugieren un futuro prometedor en la lucha «contra esta enfermedad a la que lograremos vencer con empeño».